Tipos de seguros para tu vivienda

Una de las cosas más importantes que hay que saber a la hora de adquirir un seguro, es saber los tipos de seguros para tu vivienda y cuál se ajusta mejor a tus necesidades. En éste artículo te presentaremos cuáles son y los explicaremos para que puedas tomar la mejor decisión.

Ya sea que estés a punto de comprar tu primera póliza de seguro para propietarios de vivienda o que quiera actualizar su póliza actual, es fundamental que conozcas los aspectos básicos de la cobertura de un seguro de casa. Antes de poder tomar una decisión deberás familiarizarte con los diferentes tipos de seguro de casa que tienes a tu disposición.

En el mercado en general hay varios tipos de seguros, estos no son exclusivos para las personas que son dueñas de la vivienda. Entre los tipos de seguros se pueden destacar los que van dirigidos a los propietarios, inquilinos o arrendatarios.

• Propietarios: Es ideal para las personas que siendo dueñas de su casa o departamento
• buscan una protección para su hogar, incluyendo todo lo que este contenga.
• Inquilinos: En el caso de este servicio, es destinado para aquellas personas que rentan una propiedad y desean asegurar sus pertenencias ante cualquier robo o fenómeno natural.

Arrendatarios: Las personas que tienen una propiedad en renta y quieren protegerla de daños estructurales, este es un plan específico para eso.

Como ya vimos, existen protecciones para todo tipo de daños. Es importante revisar las condiciones de la zona en que se encuentra tu vivienda para poder determinar cuáles son las probabilidades de desastres y buscar que tu póliza cubra en específico dichos eventos.

Eventos que puede cubrir una póliza de seguro:

• Catástrofes naturales: Las pólizas enfocadas a los catástrofes naturales amparan daños estructurales o los objetos contenidos que pueden perderse por efectos como: Terremotos, erupciones volcánicas o desastres meteorológicos.

• Incendios, rayos, explosiones: Este tipo de póliza protege la pérdida total o parcial de los bienes. Tanto a la construcción como a los bienes muebles y objetos personales.

• Rotura accidental de tuberías: Cubre cualquier accidente relacionado con las instalaciones hidráulicas que provoque daño al patrimonio pueda ser cubierto.

• Caída de árboles: Protege la estructura de la vivienda y cualquier daño que pudieran ocasionar la caída de árboles.

• Remoción de escombros: Tras una afectación por cualquier fenómeno que estén cubiertos por la póliza, la aseguradora puede encargarse de actividades de demolición, limpieza y acarreo para una construcción de lugar.

• Equipo electrodoméstico: Contempla la cobertura de daño de todo tipo de aparatos electrodomésticos, como lavadoras, refrigeradores, televisiones. Que puedan sufrir daños por eventos naturales o por accidentes. Tenga en cuenta que las pólizas no contemplan a aparatos electrodomésticos móviles.

• Equipo electrónico fijo: La cobertura de gastos abarca daños por incendio, rayos, explosiones. Más eventos que puede cubrir una póliza de seguro

• Gastos extraordinarios: Esta cobertura contempla el pago de una renta de una casa o departamento. En caso de que no se pueda habitar más el inmueble asegurado, ya sea en un periodo de 6 meses o hasta agotar la suma asegurada.

• Rotura de cristales: Incluye domos y acrílicos exteriores. Cubre su costo de reposición, así como su instalación, siempre y cuando formen parte del inmueble.

• Vandalismo: Se trata de una cobertura especial que cubre actos provocados por personas que participen en algún tipo de disturbio o manifestación que pudiera dañar la propiedad.

• Accidentes personales: Se pueden asegurar también a las personas dentro del hogar por accidentes que pudieran ocurrir. Con las sumas que cubren gastos hospitalarios o funerarios.

• Obras de arte: Es una protección para obras o materiales artísticos.

• Objetos personales: Se trata de una protección contra robo o intento de robo de objetos de uso personal. Como podrían ser ropa, accesorios, joyería e, incluso, bicicletas.

• Incendio de pertenencias: Cubre los daños a los contenidos del domicilio, causados por incendios, rayos y explosiones.

• Robo de dinero: El dinero en efectivo protegido en el interior del domicilio o en el exterior con o sin violencia. Cuestiones que afectan el ámbito familiar, que cubren las pólizas

A demás de lo antes mencionado, las pólizas también pueden cubrir cuestiones que afectan el ámbito familiar, como pueden ser:

• Responsabilidad Civil Familiar: Se trata de daños causados por sus bienes de manera accidental por terceros o habitantes.

• Responsabilidad Civil Doméstica: Son daños causados sobre sus bienes por trabajadores que presten sus servicios a domicilio. Coberturas adicionales que se pueden añadir al seguro de vivienda La cobertura de vivienda no cubre absolutamente todo, sin importar los límites de la póliza. Por tal motivo, es conveniente personalizar (la póliza) mediante la incorporación de coberturas adicionales. Así tendrá exactamente lo que necesita según su situación particular.

Recomendaciones:

• Que la información de la póliza esté correcta antes de firmar.
• Asegúrate que cubra el riesgo que en verdad necesita.
• Documenta tus pertenencias, eso te ayudará a realizar el reclamo ante la aseguradora. Incluso puedes incluir fotografías o un video.
• Por tu propia conveniencia declara la verdad e informa sobre la situación real de tu vivienda; los materiales con los que se construyó, los niveles, el uso que se le da, etc.
• Es importante leer las condiciones generales, especialmente las relacionadas a las exclusiones y deducibles del seguro.
• No olvides las fecha de pago de las primas, ya que la falta de pago puntual puede ocasionar la cancelación del seguro y la protección que este ofrece.
• Al asegurarse con alguna compañía, considera la conveniencia de renovar y mantener tu seguro vigente con dicha institución. Esto debido a que al cambiarse a otra aseguradora podría perder ciertos derechos y beneficios adquiridos.
• Conserva el recibo de pago, ya que es la manera de comprobar que se cubrió el costo de la póliza.
• Resguarda los documentos importantes como lo es la póliza del seguro, con varias copias y guárdalas en lugares accesibles.
• Conoce el proceso de reclamación en caso de algún siniestro.
• Resguarda las escrituras de tu casa y las fotografías del inventario.
• Si la cancelación es inminente, indiga si existe un valor de rescate estipulado en la póliza, este se genera por lo regular en el tercer año de vigencia.